Federal 1990 (E. Echeverría)
Como es vivir en el barrio: Prejuicios y expectativas
El barrio Federal tiene como característica particular, la ausencia de conflictos basados en prejuicios, de acuerdo a lo relatado por los vecinos que fueron entrevistados.
Con relación a la percepción que tienen sobre el barrio quienes no lo habitan, los vecinos han manifestado haberse sentido aislados en un primer momento debido al alambrado perimetral que rodeaba el barrio y de acuerdo a la apreciación de uno de ellos los hacía ver como un barrio privado. Algunos entrevistados advierten que hay personas que viven fuera del Federal que piensan que es un lugar tranquilo y seguro, en tanto otros no lo ven de la misma manera y se relevó un testimonio que sostiene que hay personas que consideran que se trata de un barrio que tiene muchos beneficios, el mismo vecino que afirma esto también agrega que a su criterio el Federal tan solo “tiene lo esencial de una casa y nada más”.
Se repiten a lo largo de las entrevistas testimonios de vecinos que perciben ambigüedad en la mirada de aquellos que no habitan en el barrio, algunos creen que lo consideran un barrio de olvidados en tanto otros se muestran conformes con el proyecto desarrollado.
Algunos vecinos refieren haber recibido valoraciones positivas sobre la existencia del Federal en la zona, ya sea porque lo prefieren al descampado que había anteriormente en el lugar o porque les agradan las viviendas construidas y la tranquilidad que perciben en el ambiente.
Uno de los entrevistados, cuenta que compañeros de su trabajo que conocieron en lugar en una visita, se mostraron interesados en adquirir una vivienda para mudarse al barrio si encontraban una disponible que les fuera entregada con la carpeta de documentación correspondiente a la adjudicación.
Los entrevistados en el barrio, no manifestaron hechos por los cuales se sintieran discriminados por registrar domicilio en Federal, por el contrario expresaron que no tuvieron inconvenientes a nivel laboral. Uno de ellos sin embargo refiere que lo que puede derivar en un problema es la distancia que exista entre el lugar de trabajo y el barrio.
Se presentaron casos de vecinos que al ser consultados sobre los inconvenientes que pudieron padecer por vivir en el barrio, retoman la cuestión del mal estado de las calles y refieren que ni las ambulancias ni las autobombas podrían circular por las arterias interiores aunque fueran situaciones de emergencias.
Los vecinos que respondieron la entrevista en profundidad concuerdan en la apreciación que tienen sobre el mismo, a todos ellos en mayor o menor medida les gusta el barrio. No se han relevado opiniones negativas y dentro de los que manifestaron agrado por el barrio algunos se muestran intransigentes a abandonarlo, En tanto el único vecino dispuesto a volver a su lugar de residencia anterior, fundamenta su deseo por la cercanía de sus familiares y no por una cuestión relacionada directamente con las características del barrio.
Asimismo vuelve a surgir un fuerte sentimiento de orgullo y felicidad por ser y sentirse dueños del espacio que habitan con sus familias y por las condiciones de vida que este le permite llevar.
También se han relevado testimonios que refieren que la convivencia en el barrio no reviste mayores problemas, que los vecinos son agradables, aunque no se registre mucha participación en actividades vecinales. La relación es más individualista pero de mucho respeto. Describen a sus vecinos como personas de trabajo y en opinión de un entrevistado “de la misma condición” ve reforzada su percepción por la uniformidad de las casas.
Las carencias de infraestructura que mencionaron a lo largo de las entrevistas los vecinos del barrio, se centran principalmente en tres temas, la imperiosa necesidad de contar con establecimientos educacionales dependientes del estado que cubran todos los niveles de educación, la urgencia de instalar un centro de atención primaria que cubra la atención de la salud de los pobladores, debido a que sólo son asistidos con unidad ambulatoria y por último mejorar el estado de las calles de circulación ya que los días de lluvias el barro que se acumula impide el ingreso y el tránsito incluso de vehículos que prestan servicios de emergencia como las ambulancias, bomberos o policías. También se pudieron relevar pedidos más aislados de más seguridad, por lo que sugieren la instalación de un destacamento policial en el barrio y que se procure el ingreso de los medios de transporte público al interior del barrio a fin de agilizar y mejorar su conectividad con los centros urbanos y comerciales pero por sobre todo para poder reducir los tiempos de viaje a los trabajos, a las escuelas y al hospital.