Del Corpus entrevistas se desprende que mayoritariamente los vecinos creen que desde afuera, el barrio se percibe como un lugar donde a la gente no le gustaría vivir, fundamentalmente porque lo consideran una “villa” y piensan que asocian esta calificación con un lugar poco confiable y peligroso.

Algunos de los vecinos consideran que esta percepción es errónea o al menos injusta ya que es un barrio poblado por trabajadores y no por delincuentes y ahora es un lugar tranquilo.
La mayoría de los entrevistados refiere que no ha sido un inconveniente registrar el domicilio en el barrio Alsina al momento de buscar un trabajo, pero les resulta problemático cuando se trata del ingreso de personas ajenas al barrio. La discriminación proviene incluso de los propios vecinos de San Fernando.

Las complicaciones se presentan a la hora de utilizar un servicio de remises, del ingreso de proveedores o repartos a domicilio o cuando invitan a alguien a sus casas porque muchos lo califican de “zona peligrosa” aun sin conocerlo.