Sarmiento
- Introducción
- Ubicacion del barrio en el Municipio
- MetodologÃa
- El barrio
- Mapa fotográfico
- La Vivienda
- Pobreza, indigencia y hacinamiento
- Trabajo, Ingresos y Planes Sociales
- Redes de ayuda
- Educación y salud
- Como es vivir en el barrio: prejuicios, xenofobia y expectativas
- Que dice la Academia sobre el barrio
Como es vivir en el barrio: prejuicios, xenofobia y expectativas
Dentro de las imágenes que comparten los habitantes del barrio en relación a cómo consideran que los perciben los residentes de zonas aledañas, la opinión generalizada que se desprende del corpus de entrevistas analizado es que los vecinos que habitan los alrededores tienen un concepto desfavorable del barrio debido a que lo consideran una “villa” y piensan que asocian esta calificación con un lugar poco confiable y peligroso, habitado por malas personas. Por este preconcepto es que tienen temor a ingresar al interior del barrio. Algunos relatos indican que los remises no quieren ingresar por este motivo y además por el barro.
El problema del barro también provoca que en algunos momentos sientan discriminación. Así lo cuenta una vecina que en el jardín de sus hijos cuando llegan con barro en los zapatos los tratan de sucios y cree que por esto también recibe miradas de otras personas que la incomodan.
Algunos vecinos en defensa del barrio expresan que es errónea o al menos injusta, la calificación de “villa”, porque para algunos pobladores se trata de un barrio al que le faltan cosas, pero es tranquilo, lindo y no viven personas de mal. En otro caso el argumento defensivo que justifica lo inapropiado del término “villa” para referirse al barrio, es que no existen pasillos al interior del mismo.
Los entrevistados en el barrio, no manifestaron hechos por los cuales se sintieran discriminados por registrar domicilio en Sarmiento, por el contrario, expresaron que no tuvieron inconvenientes a nivel laboral ni de otro tipo.
Solo se relevaron dos casos en los que mencionaron como inconveniente a causa de residir en Sarmiento, al barro frecuente que le impone tener que salir con botas de lluvia y cambiarse el calzado una vez llegada al asfalto, en un caso y la negativa de los remiseros a ingresar al barrio, en el otro.
Desde la mirada de un grupo de entrevistados el estado no colabora con el barrio Sarmiento de la misma manera que lo hace con otros barrios, advierten diferencias entre las acciones que lleva a cabo dentro del barrio con las que desarrolla fuera de él.
Son coincidentes en señalar que perciben abandono e indiferencia de parte de las autoridades municipales y actúan como si el barrio no existiera. Asimismo, consideran que existe una diferencia importante entre la ayuda que reciben ellos y las que brinda el gobierno de la C.A.B.A. uno de los entrevistados resalta los servicios de policía y bomberos que se presentan en cuanto hay un problema. Otra vecina en cambio, lo que considera diferente entre ambos recortes territoriales es la mayor oferta de trabajo para quienes se ocupan en casas particulares.
Por último, sólo tres entrevistados reconocen alguna participación positiva del Estado en el barrio. Se trata de la entrega de guardapolvos al inicio del ciclo lectivo sin especificar que instancia de gobierno lo pone en práctica en el territorio, entrega de leche por parte de la municipalidad de Esteban Echeverría y el retiro de basura que, en ocasiones, realiza la ACUMAR.
Se destaca entre estos testimonios una vecina que señala que reciben mucha ayuda desde que la Defensoría interviene en el barrio y que, por estas acciones, sin especificar cuáles, el barrio tiene un mejor funcionamiento y se están obteniendo más cosas.
Cuando fueron consultados sobre el futuro del barrio, los entrevistados, llamativamente coincidieron en expresar lo que a ellos les gustaría que cambiara en su lugar de vivienda. No han hecho comentarios, sobre cómo imaginan que sería el barrio en unos años, por el contrario, aportan ideas que consideran indispensables para resolver problemas actuales o para lograr que el barrio progrese.
Las prinicipales demandas, se orientan a mejorar la infraestructura del barrio, pidiendo que resuelvan el problema del agua principalmente, pero sobre todo que se urbanice todo el barrio, Los servicios básicos que esán dispuestos a pagar y el reconocimiento municipal como un barrio más de Esteban Echverria.
Por último, los vecinos entrevistados también solicitaron, una salita y una escuela de nivel inicial.
Los testimonios relevados en las entrevistas con relación a las expectativas sobre el futuro de sus hijos, coinciden en cuanto al deseo de que sus hijos finalicen los estudios secundarios y que puedan acceder y graduarse de la universidad, consideran que el estudio es fundamental para incrementar las opciones laborales y poder acceder a una mejor calidad de vida. Incluso manifiestan que, tener un título les brindará la posibilidad “de ser alguien en la vida”.
Coinciden también, los relatos que refieren que desean lo mejor para sus hijos y que disfruten la infancia y la juventud, en Sarmiento, lejos de la droga y el alcoholismo.